A principios del siglo XXI, 900 millones de personas no tienen acceso al agua potable, 2.600 millones no gozan aún de saneamiento y dos millones siguen muriendo cada año por el consumo de agua no depurada -la mayoría niños menores de cinco años-. La Sed del Mundo, dirigido por Yan Arthus-Bertrand en colaboración con el Foro Mundial del Agua, fue filmado en unos 20 países y rinde homenaje a todos aquellos que luchan en el mundo para mejorar el futuro de los más pobres y muestra soluciones para administrar, ahorrar, depurar el agua.
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